22 marzo, 2015

¿POR QUÉ?

                       Esta mañana nos ha sorprendido comprobar el destrozo sin razón causado durante la noche en el maravilloso mirador en el que se encuentra el parque infantil situado al final de la Calle Arenas Gordas.

            Algunos, que a todas luces se encontrarían muy aburridos, han arrancado de cuajo varias señales de circulación y  con aquella que no han podido se han molestado en doblarla, intentando rematar la faena con los columpios del parque.

            Llama la atención el esfuerzo que han tenido que hacer para desenterrar del suelo casi un metro de anclaje, así como el entretenimiento en enredar los columpios para fastidiar a los niños y niñas que pudieran utilizarlos.

            Puesto el asunto en conocimiento de la autoridad competente, esperemos que tomen las medidas oportunas.

¡Cuánta energía y qué poco talento!

Federico Soubrier