14 enero, 2025

AVES DE MAZAGÓN: EL GORRIÓN MOLINERO

Por Rafael R. Porrino

 A los profanos en el mundo de las aves les llamará la atención saber que bajo el nombre de “gorrión” no designamos únicamente al entrañable pájaro que todos conocemos por su vecindad al ser humano en pueblos y ciudades, sino que, por el contrario, en castellano el nombre genérico de gorrión se aplica no solo al Passer domesticus -que así se llama técnicamente el familiar gorrión común-, sino a otras cuatro especies más de las que se distribuyen por la geografía española.

 Una de ellas es el gorrión molinero Passer montanus, pariente cercano del común, aunque mucho menos conocido que este, y ello a pesar de ser otra de las aves que en algunos lugares llega a hacer su vida muy cerca de las personas.

Se trata de un ave algo menor en tamaño que el gorrión común, y de colorido semejante, pues en su plumaje se combinan el marrón, los tonos pardos-ocres, y el jaspeado en negro. Sin embargo, destaca en su cara un marcado contraste entre el pequeño babero negro, el blanco de las mejillas, y un parche negro a cada lado de ellas. El pico es negro, siendo de un característico color castaño la parte superior de la cabeza -o píleo-. Ambos sexos son muy similares, lo cual representa otra diferencia con respecto a su más abundante pariente, del que se distingue también por su reclamo.

Si bien es un pájaro de los considerados residentes (es decir, que vive todo el año en la misma zona), a finales de verano, tras la reproducción, suele desplazarse a zonas agrícolas más abiertas de las proximidades, donde se forman bandos de jóvenes y adultos que comparten sus días alimentándose de semillas y material vegetal.

 Ya mediado el invierno suelen regresar al entorno de las zonas de anidación, donde se asientan definitivamente a inicios de la primavera para sacar adelante sus nidadas. Para ubicar el nido eligen siempre oquedades como agujeros naturales en árboles,  orificios bajo tejas, grietas en paredes de construcciones abandonadas, etc. Suele reproducirse en pequeñas colonias laxas de unas cuantas parejas, en las cuales se puede observar a ambos progenitores aportando comida a sus polluelos, consistente en esta época del año en gusanos, orugas, mariposas, saltamontes, y otros invertebrados, además de algunos semillas y frutos.

El gorrión molinero mantiene una distribución irregular en la provincia de Huelva. Sus mejores poblaciones se hallan en los pinares y bosques mixtos más cercanos a la costa y en la corona forestal de Doñana y su entorno de campiñas arboladas, volviéndose más escaso en la Cuenca Minera, y pasando a ser poco común -o incluso raro- en la mayor parte del Andévalo y la Sierra.

En Mazagón tenemos la suerte de encontrarlo en algunas partes del casco urbano, pues es una especie que suele dejarse ver por jardines, especialmente si en ellos hay pinos de buen porte, así como por el Parque y otras zonas arboladas.

Como curiosidad hemos de apuntar que esta especie es una entre las que mejor aceptación tienen las cajas-nido, no dudando en establecerse en ellas cuando las tienen disponibles en áreas boscosas y en jardines y parques urbanos. Estas cajas pueden adquirirse en comercios especializados, si bien podemos también construirlas nosotros mismos con listones de palés o tablones, y así poder colocarlas en nuestro entorno. Para ello resultan de gran ayuda las indicaciones en webs como esta del grupo ecologista Xoriguer, o esta del blog QuadernNatura.


Fotografías: Rafael R. Porrino