27 abril, 2013

Colectivos ecologistas inciden en que "cumplir la normativa" supone no realizar el gasoducto en Doñana

Coinciden con la Junta en que se debe hacer respetar el dictamen científico, que implicaría no dragar el río mientras no se recupere
Foto: Juanjo Carmona, WWF ESPAÑA
 SEVILLA, 26 Abr. (EUROPA PRESS)
   El sector ecologista han reaccionado tras la reunión mantenida con el consejero de Agricultura, Pesca y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Luis Planas, con responsables nacionales de las asociaciones WWF, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO-Birdlife y Amigos de la Tierra para, entre otros asuntos, intercambiar puntos de vista sobre los proyectos de almacenamiento y aprovechamiento de gas natural en el entorno natural de Doñana a cargo de Gas Natural Fenosa.
   Según han informado a Europa Press fuentes ecologistas, Planas ha asegurado a estos colectivos que se hará cumplir la normativa al respecto, ya que "el primer interés es preservar Doñana", razón por la que se ha paralizado la tramitación y se ha reclamado una reevaluación por parte del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.
   En este sentido, se ha apuntado a la idea de que el cumplimiento de la normativa pasa, precisamente, por no ejecutar esta acción, puesto que "no se puede hacer otra interpretación", si bien la postura de la administración autonómica --con la que los ecologistas están satisfechos por haber procedido a parar los trámites-- es la de seguir estudiando la iniciativa.
   La reunión no se limitó únicamente a tratar el gasoducto, puesto que también hubo tiempo para debatir el proyecto del dragado de profundización del río Guadalquivir. Las fuentes consultadas coinciden en dejar claro que la Junta fue más "firme" en este aspecto, en tanto que la Consejería defiende que hay que hacer respetar el dictamen de la Comisión Científica, "que considera que no se puede hacer el dragado mientras no se recupere previamente el río".
   Aunque "el último clavo del ataúd", en referencia al dictamen definitivo, la tiene el Ministerio, los ecologistas consideran que la Junta tiene más margen de maniobra que el expuesto hasta ahora para actuar. Así, y frente a la "presión" existente para ejecutar el dragado, apuntan al "error" de un "macroproyecto despilfarrador y con un enorme impacto medioambiental que no será una solución para el desarrollo sostenible".