15 marzo, 2013

Denuncian la extracción de gas en Doñana "sin autorización ambiental unificada"

Foto: Europa Press

Fuente: Europa Press
HUELVA, 15 Mar.
   La Comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo ha admitido a trámite la denuncia de Mesa de la Ría relativa a la extracción de gas en Doñana "sin la Autorización Ambiental Unificada (AAU)" correspondiente "vulnerando la directiva de la Prevención y Control Integrados de la Contaminación (IPPC)".
   Según ha informado a Europa Press la asociación, esta ha presentado la denuncia en la Comisión Europea y en forma de petición en el Parlamento Europeo, y les ha sido notificada la admisión y apertura del correspondiente expediente administrativo
   De este modo, apuntan que Repsol extrae gas en las costas del Parque Nacional, que "deshidrata en sus instalaciones en tierra y lo inyecta en la red de gasoductos que atraviesan Doñana", sin tener previsto "tratamiento para sus residuos, los cuales "se vierten en una arqueta de la red de saneamiento de Huelva, mediante convoyes camiones-cisterna que los trasladan durante 30 kilómetros".
   En este sentido, consideran que "Repsol realiza todas estas actividades, sin Autorización Ambiental Unificada (AAU) desde abril de 2008", al tiempo que han asegurado la empresa gasista funciona "sin la preceptiva Autorización Ambiental Unificada (Directiva Europea IPPC)" a la que era obligatorio que "se adaptaran todas las industrias existentes con anterioridad a su promulgación con el límite de fecha impuesto por la Unión Europea el día 30 de abril de 2008, según la disposición final sexta de la ley 42/2007, de 13 de diciembre, del Patrimonio Natural y de la Biodiversidad".
   Inciden en que Repsol "deshidrata el gas que llega a través de los gaseoductos submarinos a sus instalaciones en tierra ubicadas a escasos cien metros del parque natural de Doñana y desde allí lo inyecta en la las redes de gaseoductos que atraviesan los espacios protegidos de la red Natura-2000 de Doñana".
   Según argumenta la Mesa de la Ría, la petrolera al carecer de autorización ambiental, "no tiene previsto el tratamiento de sus residuos, ni contempla la reinyección del agua geológica contaminada de formación en el yacimiento, porque según los Reales Decretos 1824/1995 y 1825/1995 de 3 de noviembre, pretende dedicar el yacimiento una vez se agote, al almacenaje subterráneo de gas, al igual que el proyecto de Gas Natural Fenosa".