14 marzo, 2013

DEGUSTADA EN MAZAGÓN

Esta tarde, tras ver la foto que tenía mi amiga Virginia Tomé en su móvil, le he pedido que me la pasase pensando que debería compartirla. Los fresones, cuyo tamaño sorprende, son procedentes de la finca Juana Ruíz, cuyo propietario Fulgencio Infante, su marido, me explicaba que son de la variedad “Antilla” originaria de California y que espera que se sigan produciendo al menos hasta junio. La extensión está asociada a la Cooperativa Fresón de Palos, constituida por 192 cooperativistas. Virginia supervisa los trabajos de doce malíes que no tienen más remedio que llamar a Fulgencio “Pepe” por problemas lingüísticos y realmente resulta sorprendente ver esta preciada fruta, “el oro rojo”, comparándola con el tamaño de su mano, sobre todo con lo que la lluvia ha afectado a la producción. He tenido la ocasión de degustar alguna caja de estos fresones, regalada por mis amigos de Mazagón y no sé si es más sorprendente su sabor o su aroma, que invade el frigorífico, la cocina y media casa. Enhorabuena por vuestro trabajo.
Federico Soubrier García