19 mayo, 2018

RECORDANDO EL PASADO. Burgos Mazo acusado de cacique en la Cámara de Diputados

Extraído del diario El Adelanto

Salamanca, 12 de agosto de 1931

Madrid.- A las 4,20 de la tarde, abre la sesión el señor Besteiro.

En el Banco azul, el ministro de la Guerra.

EL SEÑOR MARCOS ESCUDERO denuncia que en la provincia de Huelva sigue imperando el caciquismo, teniendo los caciques a su disposición a la fuerza pública y dice que el amparador de estos desmanes es el gran cacique Burgos Mazo, que desde que perdió las elecciones está hidrófobo (Grandes risas).

Refiere el diputado que el 31 de Agosto los socialistas y republicanos de Huelva organizaron un mitin en Moguer y que Burgos Mazo adelantó la fecha de una conferencia que tenía anunciada, para coincidir con el acto republicano.

Mientras celebrábamos el mitin —refiere el diputado— pasaban ante la puerta del Círculo, todos los secuaces de Burgos Mazo, dando mueras a la República, a los socialistas y a los republicanos.

Dice que después del mitin encontraron la carretera que conduce a Huelva toda llena de tachuelas, colocadas por los secuaces de Burgos Mazo y a la salida del pueblo un carro cruzado en la carretera, colocado sin duda con la intención de que volcaran. Cortaron la luz del pueblo, al objeto de que se nos detuviera por los guardas; pero en virtud de un aviso de los elementos de la U.G. de T; en aquel pueblo, falló el plan.

Continúa diciendo que Burgos Mazo y sus satélites, al conocer la noticia de que les había fallado la detención, dijeron: “Por esta vez, se nos han escapado; pero para otra, les esperamos”.

EL SEÑOR ALGORA: Pues Burgos Mazo es radical.

(Los diputados radicales protestan y niegan que el señor Burgos Mazo pertenezca al partido radical).

 EL SEÑOR MARCOS ESCUDERO dice a la Cámara que tiene que terminar ese condado de Burgos Mazo, y termina su discurso relatando la siguiente anécdota, que es referida a todo visitante en el pueblo de Moguer:

Una mujer llamó a la puerta de la casa de Burgos Mazo, y al preguntarle uno de los criados qué deseaba, contestó que iba a recomendar a don Manuel para que colocara a su hijo. El interlocutor de la mujer, le contestó: —Si su hijo no es un chulo o asesino, Don Manuel no le colocará.

(Grandes risas).