22 octubre, 2009

Cáritas alerta de que 200 personas malviven en chabolas

FOTO: ODIEL INFORMACIÓN
FUENTE: ODIEL INFORMACIÓN
Cáritas Diocensa de Huelva expresó ayer su “preocupación ante la llegada del invierno y la permanencia de los asesoramientos” de inmigrantes en la provincia, a la par que alertó de que alrededor de unas 200 personas malviven en chabolas hechas con plásticos de la fresa.
Según explicó Cáritas, “la realidad de los asentamientos en la provincia de Huelva, ubicados principalmente en los municipios de Mazagón y Lepe, es una de las preocupaciones principales de Cáritas”.
En este sentido, recordó que “actualmente, alrededor de 200 personas malviven en chabolas hechas con los plásticos de la fresa, sin las mínimas condiciones de salubridad y en una situación que se perpetúa sin que nadie sepa ofrecer soluciones reales”.
Así, según explicó Cáritas Huelva “pese a las políticas de contratación en origen y la dificultad cada vez mayor para encontrar trabajo en las campañas, estos jóvenes permanecen acampados, esperando una oportunidad para trabajar”, a lo que añadió que “la mayoría carecen de documentación, aunque hay algunas decenas que sí la tienen, y aún así no encuentran trabajo”.
Por otro lado, indicó que “tradicionalmente, los asentamientos desaparecían una vez terminada la campaña de la fresa, a finales de junio”. “Este año, sin embargo, dos centenares de personas han permanecido en la provincia, en parte porque otras campañas no han podido absorber esta mano de obra”, lo que supone “la presencia permanente de personas en los asentamientos, que pasarán el invierno en los campos, lo que acarreará nuevas problemáticas”.
Por ello, Cáritas Huelva informó que “varias ONG están trabajando ya sobre el terreno, ofreciendo ayuda humanitaria y resolviendo situaciones puntuales de salud, documentación y otras cuestiones sociales” así como “también los ayuntamientos están impulsando un Plan Estratégico sobre Asentamientos de Inmigrantes para tratar de reducirlos o eliminarlos”, por lo que esperó que “entre todos seamos capaces de ofrecer una salida digna a estas personas antes de que llegue la temporada de frío y lluvias”.
No obstante, la delegación de Cáritas en la provincia onubense alerta sobre la necesidad de “evitar que esta situación infrahumana aumente”.