12 diciembre, 2012

Paladas de amistad

Noticia publicada en el diario "La Nueva España" de Gijón sobre la piragüista mazagonense Irene Pascual
La grupista Sara Ouzande acoge en su casa a la onubense Irene Pascual tras el cese de actividad del CAR de Sevilla
Fuente: www.lne.es
GIJÓN, J. J.  Sara Ouzande e Irene Pascual se conocieron en una competición de piragüismo en el año 2010, una es gijonesa y la otra onubense y a pesar de la distancia se hicieron amigas. En aquellos momentos ninguna de las dos podían imaginar el giro que esta amistad iba a producir especialmente en la vida de Irene. Esta andaluza de 17 años llevaba un par de años entrenando en el Centro de Alto Rendimiento de Sevilla, pero el pasado verano quedó patente la falta de fondos para continuar con sus actividades.

Irene se quedó en ese momento sin un lugar para entrenar lo que en la práctica le obligaba a dejar el piragüismo. Sin embargo su desgracia llegó a oídos de Sara quien propuso en su familia acoger a Irene y que ésta empezase a entrenar con el Grupo. Sus padres no pusieron impedimento alguno porque la llegada de una joven de 17 años no les asustaba en absoluto, ellos están acostumbrados porque desde hace varios años acogen durante los veranos a niños saharauis.

La relación entre ambas era ya bastante estrecha porque Irene había pasado con anterioridad parte de sus vacaciones en casa de Sara y ésta a su vez le había devuelto la visita. Así que cada una conocía a la familia de la otra y viceversa, lo que ayudó a la hora de tomar la decisión de trasladarse a Gijón.

El siguiente paso fue hablar con la directiva grupista quien también acogió bien la idea porque Irene suponía un buen refuerzo para el equipo femenino. La familia de Irene fue la siguiente en tratar de convencer y, aunque reacios en un principio, tras una conversación entre los progenitores de ambas dieron su consentimiento y a finales de septiembre Irene llegó a Gijón a tiempo para matricularse en el instituto Calderón de la Barca y ponerse a las órdenes de Almudena Ávila, responsable de la sección de piragüismo del Grupo Covadonga.

«No me costó tomar la decisión» reconoce Irene quien además ha tenido la suerte que en su misma clase está otro piragüista del Grupo, Rubén Tuset, lo que le ayudó a integrarse. Ahora lleva algo más de dos meses y ya se ha adaptado a su nueva vida y echa pocas cosas de menos, incluso ni el frío es un obstáculo. «Cuando estaba en Sevilla llamaba poco a casa y al venir aquí lo hacía más a menudo hasta el punto de que mi madre pensó que no me encontraba bien y tuve que convencerla de que no era así».

Ávila define a Irene como «una chica técnicamente muy buena y que tiene una gran capacidad de mejora». La andaluza trabaja ya con el resto del equipo grupista y su entrenadora tiene puesta en ella muchas esperanzas para que se integre en el K-4 y éste pueda mantener el elevado nivel mostrado la pasada temporada en la que quedó campeón de España con Miriam Vega, Celia Ramis, Paula García y Ana Martínez. Estas dos últimas han pasado a la categoría senior y precisamente Sara e Irene son las elegidas para sustituirlas. Hasta ahora nunca se habían enfrentado directamente en competición pero este año comenzarán a hacerlo en las competiciones regionales que darán comienzo en febrero, luego llegarán las nacionales.

Irene irá a su pueblo, Mazagón, para pasar la Navidad, pero en enero volverá a Gijón para seguir practicando su deporte favorito