04 junio, 2013

EL MANANTIAL DEL PARQUE

Contaba, y seguramente así será, con que el pequeño estanque que se forma con el afortunado chorro de agua del manantial del parque se acondicionaría con las piedras rústicas que han estado utilizando para decorar y delimitar espacio de ocio y aparcamientos. Imaginaba un pequeño embalse protegido con una muralla a su alrededor, poblado por la vegetación propia de las charcas, la que siempre ha habido allí.
He podido comprobar que el viento, y lo que no lo es, ha hecho que la lagunilla se contamine de plásticos, latas de refrescos y vasos con restos de bebidas alcohólicas. Las ranas seguían esta mañana croando alegres y muchos renacuajos nadaban entre los residuos. Tal vez se pongan un poco piripis por los efectos etílicos, o tal vez  se mueran, lo cual sería una pena, ya que en las noches de verano el croar de estas magnificas devoradoras de mosquitos da un sonido muy peculiar y agradable a la zona.

Federico Soubrier García