12 abril, 2025

Convocan una concentración en el asentamiento de Las Madres para denunciar las precarias condiciones de vida de las personas temporeras migrantes y la vulneración de sus derechos

12/04/25
Más de treinta asociaciones y colectivos del tejido asociativo onubense, así como  organizaciones sindicales y políticas abajo firmantes denuncian lo siguiente:     

Junto a los invernaderos de Huelva y Almería, que abastecen a toda Europa de productos hortofrutícolas, cientos de personas trabajadoras malviven en condiciones que recuerdan más a un campo de refugiados que a un entorno laboral europeo. Se trata de personas temporeras migrantes que, cada año, garantizan la continuidad del modelo agroexportador andaluz. Sin embargo, sus derechos son sistemáticamente vulnerados.

Una parte de trabajadoras y trabajadores de los campos de Huelva y Almería, donde se cultivan las verduras y los frutos rojos que se exportan a países europeos, viven en chabolas sin agua potable, sin luz, sin saneamiento, sufriendo jornadas laborales extenuantes, con contratos temporales -no siempre los hay- que en muchos casos ni se cumplen y, también, sufren abusos, explotación, acoso. Esta, también es una realidad que sufren muchas personas trabajadoras que sostienen con su esfuerzo una parte importante del PIB andaluz. Y lo más grave es que se trata de una realidad conocida, repetida, documentada, pero ignorada de forma sistemática.

Mientras el campo andaluz celebra cifras récord de producción, y las grandes cadenas de distribución hacen campañas con eslóganes como “sabores de cercanía” o “producto local”, lo cierto es que la riqueza del sector se levanta sobre un sistema estructuralmente desigual e injusto. Estamos hablando de un sector que en Almería consiguió unos ingresos de 2,748,48 millones de euros en la campaña de 2003/2024 y 1200 millones en Huelva y que, sin embargo, pese a su producción exitosa, campaña tras campaña, este sector económico no ha conseguido ofrecer una condiciones mínimamente dignas a una parte de la gran cantidad de mano de obra que absorbe.

Solo en la provincia de Huelva, durante la campaña de recolección de los frutos rojos se crean más de ciento diez mil puestos de trabajo. De esa cifra, se calcula que entre 3.000 y 4.000 trabajadoras y trabajadores viven en asentamientos de chabolas.

No estamos hablando de casos ni denuncias aisladas. En 2020, Philip Alston, relator sobre extrema pobreza de la ONU, después de su visita a los asentamientos de chabolas de Huelva, expresaba así su consternación por las condiciones de vida de las personas trabajadoras de un sector económico potente. Alston dijo textualmente, “rivalizan con las peores condiciones que he visto en otras partes del mundo”.

Informes de Andalucía Acoge de 2022 o, el más reciente de la Asociación Pro Derechos Humanos Andalucía, Frontera Sur de 2025 ( https://www.apdha.org/wp-content/uploads/2025/01/Informe-Frontera-Sur-2025-DEF-.pdf) demuestran detalladamente, y con cifras, que se ha negado de forma sistemática el acceso a los derechos más básicos (sanidad, educación...) de estas trabajadoras y trabajadores migrantes, a pesar de que necesitamos su fuerza de trabajo. Ausencia de acceso a alojamientos dignos para estas personas trabajadoras, negativa de los ayuntamientos a empadronar y, por tanto, la imposibilidad de ejercer sus derechos sociales, civiles y administrativos son algunas de las muchas trabas que les imponen las administraciones.

Son innumerables también, las veces que se ha denunciado la vulneración de derechos humanos y laborales por los distintos colectivos y organizaciones locales que trabajamos día a día junto junto a las personas migrantes que viven en estos asentamientos.

Ante las denuncias, las administraciones intentan esconder este drama eliminando las chabolas sin alternativa. El fuego, tan peligrosamente presente en la vida de los asentamientos, unido a las demoliciones arbitrarias de chabolas por parte de los ayuntamientos, o de asentamientos enteros, como el caso de Almería, sin ofrecer ninguna solución habitacional, están dejando a las personas temporeras literalmente en la calle. Es el caso de Lepe en Huelva. Hace más de cuatro años que los trabajadores temporeros están durmiendo en la calle, en las campañas de recogida de la fresa que va de febrero a mayo o junio. Es decir, la intervención de las administraciones está convirtiendo el fenómeno de los asentamientos en sinhogarismo.

Ya lo dijo Philip Alston en 2020, después de su visita a Huelva: “Cada vez que le preguntaba a alguien en el gobierno, siempre culpaban a otros. No era su responsabilidad. Así que, básicamente, todos hacen la vista gorda”. En cuanto a las empresas, Alston también mostró su sorpresa de que tengan beneficios millonarios, mientras sus trabajadores y trabajadoras “viven como animales”. Igualmente dijo lo que todas y todos sabemos: “Por supuesto, las empresas y los municipios se están beneficiando enormemente. Así que creo que es realmente inadmisible que no se haga nada por mejorar la situación”.

Desde la visita de Alston hasta la fecha, o, desde hace 25 años, las administraciones han creado alojamientos para unas 250 personas en Huelva, cifra insignificante para el grave problema de falta de alojamientos.

Se trata de un modelo insostenible. Durante años se ha repetido el mantra de que "no hay mano de obra local" dispuesta a trabajar en el campo. Pero lo que no se dice es por qué: condiciones indignas, salarios de miseria, ausencia de derechos. Ante este escenario, miles de personas migrantes, muchas veces en situación vulnerable, aceptan lo que nadie más aceptaría. No porque quieran sino porque no tienen alternativas.

Lo más sangrante es que esta situación no es accidental ni fruto del descontrol. Es parte de un modelo económico planificado basado en la explotación y la ausencia de derechos para maximizar beneficios. Se invisibiliza a quienes trabajan y se normaliza que vivan sin acceso a agua, sanidad o vivienda. Todo para que la fresa siga siendo barata en el supermercado.

No es menor la explotación del medioambiente con estos cultivos intensivos que deterioran los recursos naturales y, de forma dramática, los recursos hídricos, además de la proliferación de basureros incontrolados de plástico y envases de productos fitosanitarios.

La pregunta no es si podemos permitirnos tratar con dignidad a las personas que recogen nuestros alimentos. La pregunta es: ¿cómo hemos llegado a aceptar lo contrario como algo normal? Los derechos no pueden ser un privilegio ligado al lugar de nacimiento.

Este modelo puede cambiar. De hecho, ya existen experiencias que demuestran que es posible producir con dignidad. Cooperativas, fincas familiares y redes agroecológicas lo están haciendo. Pero para que sea la norma y no la excepción, hacen falta políticas públicas firmes, inspecciones reales y sobre todo VOLUNTAD POLÍTICA.

Por ello, el domingo 13 de abril celebraremos una concentración a las 12h en el Asentamiento de las Madres (Moguer, Huelva) y La Plataforma Derecho a Techo celebrará, también el día 13 una manifestación en Almería para exigir alojamientos dignos.

Por todo ello exigimos:

Cumplimiento de los derechos laborales, acceso a vivienda digna, protección frente a la violencia de género en el campo, corresponsabilidad empresarial y pública y regularización de todas las personas que en estos momentos están trabajando sin permiso de trabajo. Las administraciones no pueden seguir delegando su responsabilidad en ONGs o voluntariado. Las empresas no pueden mirar hacia otro lado mientras sus beneficios dependen del sufrimiento ajeno.

FIRMAN ESTA NOTA:

1.- Asociación Multicultural de Mazagón
2.- Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA)
3.- Asociación de Mujeres Inmigrantes (AMIA)
4.- La Carpa
5.- Revista La Mar de Onuba
6.- Podemos
7.- Sindicato Unitario
8.- Plataforma de Solidaridad con Palestina de Sevilla
9.- Entrepueblos/Entrepobles/Entrepobos/Heriarte
10.- La Plaza (Sevilla)
11.- Plataforma Somos Migrantes
12.- Izquierda UNIDA
13.- ASNUCI (Asociación Nuevos Ciudadanos por la Interculturalidad)
14.- Centro Andaluz del Pueblo
15.- Ecologistas En Acción
16.- Alianza por la Solidaridad
17.- RED sos Refugiados Europa
18.- Partido Comunista
19.- Solidaridad Internacional Andalucía
20.- Iniciativa Cambio Personal, Justicia Global
21.- Asociación de Malienses de Mazagón
22.- Secretariado de Migraciones de Huelva
23.- Iniciativa del Pueblo Andaluz
25.- CGT Enseñanza Huelva
26.- Ayre Solidario
27.- Traperos Emaus
28.- Asociación de Senegaleses Onubenses
29.- Asociación de Mujeres Esmeralda
30.- Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC)
31.- Poetas de Huelva por la Paz 32.- Plataforma Huelva con Palestina