Las orugas son unos bichos que producen repugnancia en unos y serias molestias en otros. Poseen una especie de pelillos que pueden generar fuertes urticarias a personas y animales domésticos, incluso sin tocarlas. Es suficiente para producir esta urticaria que los pelillos vuelen y se posen en la superficie de la piel, produciendo irritación en piel, ojos y nariz.
El modo de control de esta plaga se puede realizar de distintas maneras: Mediante tratamientos químicos, como el triclorfon, diflubenzuron (inhibidor de crecimiento). También mediante el uso del insecticida biológico Bacillus thuringiensis, que por ingestión mata a los estados inmaduros. Otra manera de eliminarlos es, mediante la corta, recogida y quema de los bolsones que los contienen.