Laguna de las Madres, entre los municipios de Moguer y Palos de la Frontera.
Mazagón Beach, 12/12/25.
Publicado por Junta de Andalucía el 11/12/25.
La consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Catalina García, y la directora de Fundación Moeve, Teresa Mañueco, han firmado un Protocolo General de Actuación para el desarrollo de actuaciones de restauración de espacios naturales de Huelva, un acuerdo que permitirá desarrollar proyectos de recuperación ambiental en el entorno de la Laguna de las Madres, entre los municipios de Moguer y Palos de la Frontera. Este instrumento establece un marco estable de colaboración para promover intervenciones que favorezcan la conservación de este humedal singular, pieza fundamental del paraje natural Lagunas de Palos y las Madres, integrado en la Red Natura 2000 y considerado uno de los enclaves de mayor biodiversidad de la provincia de Huelva.
El documento suscrito recoge el compromiso mutuo de cooperar en acciones que contribuyan a mejorar el estado ecológico del espacio, fomentar su conocimiento social y favorecer intervenciones alineadas con los objetivos de sostenibilidad y protección del patrimonio natural andaluz.
La Laguna de las Madres, con unas sesenta hectáreas de superficie inundada de manera permanente, constituye un hábitat de extraordinaria riqueza vinculada al agua. Su capacidad de retención hídrica durante todo el año la convierte en un refugio esencial para numerosas especies de aves reproductoras, poblaciones de mamíferos tan destacados como la nutria y, en su entorno, presencia ocasional de lince ibérico. Forma parte del paraje natural Lagunas de Palos y las Madres, un conjunto que alcanza casi setecientas hectáreas junto a otros humedales cercanos —la Laguna Primera de Palos, La Jara y La Mujer— y que está declarado Lugar de Interés Comunitario (LIC) por su relevancia ecológica y Zona Especial de Conservación (ZEC) en este 2025. Además, se trata de un humedal incluido en la Lista Ramsar, así como en el Inventario de Humedales de Andalucía.
Este enclave combina valores ambientales, paisajísticos y culturales que justifican la necesidad de reforzar su conservación activa. La presión de usos en su entorno, las modificaciones hidrológicas históricas y la propia fragilidad de los ecosistemas de humedad hacen especialmente importante la planificación conjunta de intervenciones que garanticen su buen estado ecológico en el medio y largo plazo. El protocolo firmado permite disponer de una herramienta de trabajo compartida para favorecer esa mejora progresiva y generar sinergias entre la administración ambiental y una entidad comprometida con la sostenibilidad y el desarrollo de proyectos de impacto social. Los humedales son esenciales para la biodiversidad y el bienestar humano: regulan el ciclo del agua, mejoran la calidad del aire, actúan como sumideros de carbono y ofrecen espacios para educación y disfrute de la naturaleza.