01 agosto, 2017

GIMNASIO ABANDONADO


Soy usuario del gimnasio del Pabellón Francisco Díaz Torres desde hace más de 5 años y creo que se ha tardado demasiado tiempo en dar una queja formal sobre el estado del mismo.

Creo que en estas palabras manifiesto no solo mi descontento, si no el de la mayoría (por no decir todos) los demás usuarios del gimnasio.

El estado de los materiales es lamentable (adjunto fotos que lo demuestran), en resumidas cuentas, todo el material de musculación es de hierro, y al tratarse de material con muchos años, el hierro, como es normal, se oxida. Por lo tanto, mancuernas, barras, agarres, piezas de máquinas etc. presentan un estado pésimo.

Además de esto, las mancuernas están hechas a base de discos de diferentes pesos soldados entre sí y a su vez soldados a una barra que hace de agarre, eso sí, la que esta soldada, ya que hay muchas de ellas que o bien no tienen soldadura (los discos giran sobre si mismos) o bien los puntos de soldaduras acaban saltando con el uso. Con el PELIGRO que esto conlleva, es más, ya ha habido algún caso de caída de disco de una mancuerna con la suerte de no haber causado una desgracia, personalmente a mí se me calló un disco de una mancuerna y tuve suerte de quitar el pie a tiempo.


Dejando al margen los desperfectos, que no son pocos, tengo que decir que en el tiempo que llevo apuntado, nos han prometido máquinas nuevas cada año, y si, una vez trajeron máquinas del antiguo gimnasio de Moguer, y de nuevas tenían lo que yo me sé. Para colmo cada septiembre cierran el gimnasio con la supuesta excusa de “mejorar las instalaciones”, y cuando volvemos después del parón nos damos cuenta de que solo han pintado suelo y paredes y pintado las máquinas y mancuernas (a las cuales tardan meses hasta que le vuelven a pintar los pesos) y querrán hacernos creer que ese material es nuevo y lo único que pasa es que a los dos días la pintura “antienvejecimiento” que le dan al material empieza a descascarillar y se te cae encima cuando lo usas… LAMENTABLE.

Otro tema a mencionar es el uso de las instalaciones por parte de usuarios que no pagan la cuota mensual, lo cual conlleva en algunas ocasiones el ROBO de parte del material, pero el ayuntamiento de Moguer no pone a nadie que controle el acceso a las instalaciones.

Por si todo esto fuera poco, la persona encargada de los servicios deportivos del patronato amenaza con cerrar la instalación cuando se le presenta alguna queja, por lo que se ve es mejor eso que hacer una mínima inversión para mantener las instalaciones que PAGAMOS en unas condiciones medio decentes.

Además de esta denuncia, presentaré una queja formal en las oficinas del pabellón deportivo añadiendo la lista de material que falta en el gimnasio y animo a todos los usuarios a hacer lo mismo a ver si somos capaces de entrenar, al menos, de una forma más segura.

Manuel Romero