Ritmo, elegancia, sensibilidad y mucha pasión fueron los ingredientes con los que el grupo onubense Urubu conquistó ayer al público que llenaba el patio del Faro de Mazagón.
En la primera cita de Noches del faro la programación Luna de Verano nos trajo ayer a Mazagón el sabor de la mejor música brasileña.
Arropada por un grupo de excepcionales músicos, la voz llena de matices de Alejandra Blanco nos trasportó al Brasil más cálido y sensual en un concierto verdaderamente redondo que hizo vibrar a l@s espectador@s.
